Pren Rawat
Carlos Mora Vanegas
La paz debe estar presente en la vida de todos. No es el mundo el que necesita paz sino las personas. Cuando las personas que habitan este mundo estén en paz, el mundo estará en paz
Prem Rawat
Nos corresponde a cada una estar atentos en nuestro despertar, en sorprendernos en la manera como nos comportamos, actuamos, mientras se nos da la oportunidad de permanecer en esta dimensión.
Atención muy importante para crecer espiritualmente, poner en práctica acciones que nos garantice felicidad, éxito, todo aquello que fortalezca nuestro espíritu.
Han sido muchos los guías, transeúntes en esta dimensión que nos han aportado sugerencias, recomendaciones, pensamientos para ser considerados en pro de garantizar nuestra paz, crecimiento.
En esta oportunidad daremos a conocer algunas aportaciones valiosas que nos lega Prem Rawat, que nos invitan a ser consideradas, determinar su alcance y todo aquello que beneficie nuestro crecimiento.
Maharaji comenzó a enseñar a la edad de 4 años y oficialmente se encargó de la misión de su padre de esparcir este Conocimiento, a la edad de 8 años. Con un comienzo modesto en el norte de India, Maharaji ha llevado la posibilidad de la paz interior a la conciencia de millones de personas alrededor del mundo.
El continúa trabajando sin parar transmitiendo este mensaje oportuno y poderoso a todas las sociedades y culturas en la faz de esta tierra.
Al respecto de él, nos aporta, wopg.org que Prem Rawat señala, que existen únicamente dos tipos de personas en este mundo, aquellas que se han hecho estas preguntas: ¿Quién soy? ¿Qué estoy haciendo aquí? ¿De qué se trata todo esto? ¿Cuál es el propósito de mi vida? Y aquellas que no se las han hecho todavía.
¿De dónde vienen estas preguntas? La respuesta no está escrita en ningún libro. No se expresa en palabras. Reside en un sentimiento. Satisfacción, paz, comprensión… eso es importante para nosotros
¿De dónde vienen estas preguntas? La respuesta no está escrita en ningún libro. No se expresa en palabras. Reside en un sentimiento. Satisfacción, paz, comprensión… eso es importante para nosotros
Prem Rawat dirige su mensaje a cada persona, sin importar cuáles sean sus creencias, circunstancias o marco cultural. Su visión es amplia y a la vez sencilla, quiere llevar la paz a la humanidad dándole a cada persona la oportunidad de encontrar esa paz.
Se nos dice, que Prem Rawat comenta, que lo que ofrezco a la gente no son solo palabras” dice “sino una forma de ir al interior y disfrutar la paz que reside dentro de cada uno”.
Prem Rawat dirige su mensaje a cada persona, sin importar cuáles sean sus creencias, circunstancias o marco cultural. Su visión es amplia y a la vez sencilla, quiere llevar la paz a la humanidad dándole a cada persona la oportunidad de encontrar esa paz
Nacido en India en 1957, Prem Rawat, conocido por muchos con el título honorífico de Maharaji, comenzó a hablar en público a muy temprana edad. A los ocho años comenzó a enseñar, cuando su padre y maestro Sri Hans Ji Maharaj murió. A pesar de su juventud a lo largo de los cinco años siguientes viajó por India, durante sus vacaciones escolares, dirigiéndose muchas veces a un público enorme.
En 1971, cuando tenía 13 años, lo invitaron a hablar en Inglaterra y Estados Unidos, y luego a Canadá, Alemania y Francia. Así comenzó un viaje que lo llevaría a propagar su mensaje a lo largo y ancho del mundo.
En el trascurso de las cuatro décadas posteriores se ha dirigido a más de 12 millones de personas de todos los continentes, dando la vuelta al mundo incontables veces para llegar a millones de personas. Tiene una agenda físicamente extenuante que lo lleva a viajar de manera incansable para llevar su mensaje a los lugares más remotos del mundo. Es piloto profesional de avión y helicóptero, de promedio anual hace 100.000 millas para realizar más de dos eventos semanales
Se nos agrega además, que ha hablado en lugares tan lejanos como Tokio y Tenerife, Quito y Conotou, Mälmo y Miami, ante públicos tan numerosos como la de 325.000 personas que asistieron al evento en Gaya, India y tan pequeños como las 100 personas que se reunieron con él en Hapuna, Hawai. Sin importar la cantidad de público, la gente encuentra que el estilo de sus charlas, interactivas como una conversación, hace que se conviertan en experiencias personales.
En el año 2006 comenzó a llevar su mensaje más allá de las capitales mundiales, a pueblos, ciudades y a zonas rurales en India, para dirigirse a las personas que no pueden viajar para escucharlo en sus eventos.
Mientras que sus eventos públicos pueden convocar a una gran cantidad de personas, cada vez con más frecuencia recibe peticiones para hablar como invitado de honor en pequeñas reuniones formales, como aquellas del Senado Italiano y el Senado Argentino celebradas en 2006 y la que se realizó en la sede del Parlamento Australiano en 2005, donde habló en un evento organizado para conmemorar el Día de la Paz de las Naciones Unidas.
Se nos dice además sobre él, que en su vida personal, además de ser un piloto altamente cualificado, Prem Rawat es un talentoso artista, poeta, músico e inventor. Una vida entera de fascinación por la tecnología unida a una pasión por ayudar a tantas personas como sea posible, lo cualifican para explorar constantemente nuevas formas de propagar su mensaje. Sus conferencias se emiten por canales de televisión del mundo entero y están disponibles a través de una gran variedad de medios dentro y fuera de Internet. Como resultado, su mensaje está hoy en día disponible en 97 países y 70 idiomas.
conexionesconlaluz.com nos comenta que Prem Rawat, comenta que un día naciste y un día te tendrás que ir: no hay otra alternativa, no hay excepciones. Esta vida debe acabar. ¿Por qué? La misma naturaleza que es responsable de darla es también responsable de quitarla.
Es fácil considerar al nacimiento como algo bueno y a la muerte como algo malo. Para muchos el amanecer es algo bueno, mientras que el anochecer significa que el día ha acabado. Sin embargo, tu amanecer es el anochecer en otro lugar, y tu anochecer es el amanecer en otra parte. No es ni bueno ni malo. Pero no entendemos las cosas que no son ni buenas ni malas. Todo ha de ser bueno o malo, bueno o malo, bueno o malo. No obstante, hay cosas que ni son buenas ni malas; son, sencillamente, lo que son.
El río no fluye a causa de ti ni corre porque eso te perjudique o te beneficie. Fluye porque ésa es su naturaleza y lo hace desde las montañas al mar. De hecho retorna al lugar del que, en realidad, partió. Cada gota ascendió desde el océano y luego cayó en forma de lluvia. Se almacenó durante el invierno como nieve y al llegar el verano se derritió: el río comenzó a formarse gota a gota y luego fluyó.
Lo que ves es el río, pero ¿sabías que durante la mayor parte de su existencia no tiene esa forma? Estaba allí arriba o almacenado como nieve en las montañas. Su período más breve es cuando lo ves como río, fluyendo, de regreso al océano. ¿Es eso algo bueno? No. ¿Es malo? Tampoco. Sencillamente, es.
El nacimiento te da la existencia, la muerte te la arrebata. Eso son hechos. No tiene importancia que seas hindú, musulmán, judío, cristiano o budista, para todos es igual: el nacimiento te trae, la muerte te lleva
Sobre él nos dice unaposibilidad.es su discurso es simple y profundo. Durante una intervención en el Centro de Conferencias de Naciones Unidas en Bangkok (Tailandia) manifestó: “La paz que buscamos está dentro. Está en el corazón esperando a que la sintamos, y yo puedo ayudar a las personas a descubrirla. No es el mundo el que necesita paz, sino la gente. Cuando las personas de este mundo estén en paz en su interior, el mundo estará en paz”.
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